lunes, 24 de junio de 2013

Los 14 alimentos que deberías eliminar de tu dieta



Nos resistimos a tomar algunos alimentos porque no nos gustan o bien porque pensamos que son perjudiciales para nuestra salud. Sin embargo, puede que estemos consumiendo algunos productos porque pensamos que son sanos y, en realidad, están muy alejados de ser beneficiosos para nuestro organismo.

14 expertos han analizado varios alimentos y nos dicen por qué no debemos comerlos y el sustitutivo que podemos adoptar.

Comer bien no es difícil, ¡solo hay que identificar lo que es nocivo para nuestra salud y dejarlo a un lado!



Bebidas light

Isaac Eliaz, experto en salud integral y fundador de la clínica médica The Amitabba en California

Problema: Los refrescos o alimentos light o sin azúcar no son tan saludables como creemos por sus edulcorantes artificiales. La ingesta desmedida de estos productos pueden ocasionar altos niveles de azúcar y grasa en el cuerpo, provocando aumento de peso y daño en órganos como los riñones.

Solución: Evita las marcas populares y opta por otras más ecológicas, como Bionade, o bien opta por el te verde.

Pez espada

Philip Landrigan, profesor de pediatría y medicina preventiva en la Escuela de Medicina Monte Sinaí

Problema: ¿Estás embarazada o intentándolo? Evita el pescado con mercurio. El pez espada tiene altos componentes de este metal, una potente neurotoxina que puede dañar el desarrollo de los niños e incluso provocar ataques al corazón en los adultos. Además, el pez espada es a menudo sobreexplotado y los equipos que se utilizan para pescarlo se llevan por delante a tortugas, aves marinas y tiburones.

Solución: Peces de poblaciones estables, como el salmón, la caballa o el atún y que contienen ácidos omega 3. ¿Tienes un paladar más aventurero? Prueba el Pez Cabeza de Serpiente.
Fresas no orgánicas

Robert Kenner, director de Food Inc. y fundador de FixFood.org

Problema: Los pesticidas. "Cuando vi los pesticidas que se utilizaban para cultivar las fresas decidí que nunca más comería fresas que no fueran naturales", asegura Kenner.

Solución: Optar siempre por lo orgánico. El organismo que se dedica a analizar las cuestiones relativas a la agricultura de EEUU encontró 13 restos de pesticidas diferentes en las fresas cultivadas químicamente.
Cualquier cosa de un restaurante de comida rápida

Joel Salatin, agricultor sostenible y autor de "Esto no es normal, amigos"

Problema: La agricultura industrial de los alimentos: maíz modificado genéticamente, colorantes y edulcorantes artificiales... El tipo de agricultura que apoya este tipo de empresa alimentaria se basa en productos químicos nocivos que no solo ponen en peligro nuestra salud, sino también la del medioambiente.

Solución: ¡Cocina tú mismo! Además de ser más saludable, es más barato.


Pan

William Davis, cardiólogo

Problema: El trigo de hoy en día está manipulado genéticamente, lo que está provocando todo tipo de problemas de salud como el reflujo ácido, obesidad, asma y enfermedades de la piel.

Solución: Elimina el pan de tu dieta durante un par de semanas para ver si notas mejoría en tu salud. Cuando compremos pan, mejor coger el de quinoa, trigo sarraceno, pan de mijo o de arroz salvaje, pero aun así, en pequeñas cantidades.


Hamburguesas industriales

Michael Pollan, autor de numerosos libros y artículos del sistema alimentario, como 'El dilema del omnívoro' o 'En defensa de las normas alimentarias y los alimentos'

Problema: El ganado criado en condiciones insalubres y lleno de hormonas de crecimiento, sumado a que la carne de la hamburguesa suele provenir de varios animales, lo que aumenta el riesgo de contaminación,

Solución: Comer hamburguesas de animales que sean alimentados con pasto y tierras naturales por un ganadero.


Maíz

Maryam Henein y Langworthy George, directores del documental 'La desaparición de las abejas'

Problema: La modificación genética. El maíz tiene que soportar fuertes fumigaciones con productos químicos que terminan dentro de él.

Solución: El maíz está presente en la gran mayoría de alimentos procesados, así que es tarea difícil, pero podemos evitar los alimentos con un alto contenido en fructosa de jarabe de maíz.

Chocolate blanco


Drew Ramsey, profesor de psiquiatría de la Universidad de Columbia y coautor de 'La dieta de la felicidad'

Problema: El problema del chocolate blanco es precisamente el blanco. El cacao tiene muchos beneficios para la salud y el problema es que el blanco incluye más leche y sobre todo, más azúcares, por ello es menos recomendable.

Solución: Buscar versiones orgánicas o comer chocolate negro.



Edulcorantes artificiales

Maria Rodale, CEO de Rodale Inc. y autora de 'Manifiesto orgánico'

Problema: Los edulcorantes artificales, con cero calorías, son tan malos como el azúcar clásico. Además, se han encontrado restos de estos edulcorantes en las aguas residuales tratadas, lo que plantea riesgos desconocidos para peces y otras especies marinas.

Solución: El azúcar blanco refinado no es tan sano, pero podemos reemplazarlo con pequeñas cantidades de edulcorantes nutritivos, como la miel, melaza o jarabe de arce, que tienen altos niveles de vitaminas y minerales.


Hortalizas

Doug Powell, profesor de seguridad alimentaria en la Universidad de Kansas.

Problema: Las hortalizas han estado presentes en las principales enfermedades transmitidas por los alimentos en los últimos veinte años. Pueden estar contaminadas con salmonela, E. Coli o listeria, ya que sus semillas requieren condiciones húmedas y cálidas para germinar, algo ideal para que las bacterias se multipliquen.

Solución: Cocinarlas primero a altas temperaturas para eliminar las bacterias


Palomitas de maíz

Alexandra Scranton, directora de ciencia e investigación en 'Las Voces de las Mujeres para el Mundo', una organización no lucrativa que aboga por los problemas de salud ambiental que afectan directamente a las mujeres

Problema: El diacetil, un producto químico que se utiliza en el aroma de mantequilla a pesar de que la sustancia es tan perjudicial para los trabajadores de la fábrica que les causa una enfermedad llamada "pulmón de palomitas de maíz".

Solución: Hacer nuestras palomitas con mantequilla real.






Colorantes

Michael F. Jacobson, director ejecutivo del Centro de Ciencia para el Interés Público

Problema: Se les vincula con la hiperactividad de los niños y el cáncer en animales. Jacobson, además, los evita por principios: "Simplemente, no me gusta comer productos químicos sintéticos".

Solución: Leer las etiquetas para evitarlos. Incluso el queso o el yogur pueden llevarlos.




Helados


Dave Zinczenko, editor jefe de la revista Salud Masculina

Problema: Las copas de helado hechas en la mayoría de las cadenas de restaurantes son gigantes y tienen una lista de ingredientes kilométrica: azúcar, vainilla, leche, jarabe de maíz, goma de celulosa, manteca vegetal...

Solución: Helados hechos en pequeños comercios o incluso totalmente caseros.



Lata de tomate

Fredrick Vom Saal, profesor de endocrinología de la Universidad de Missouri

Problema: Los revestimientos de resina de las latas contienen bisfenol A o BPA, un estrógeno sintético que puede causar desde problemas reproductivos a enfermedades cardiacas, diabetes y obesidad. "Por un litro de una lata de tomate podemos obtener 50 microgramos de BPA", asegura Vom Saal.

Solución: Tomates en frascos de vidrio o cartón.





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